CARTA ABIERTA A VICTORINO MARTÍN
Estimado ganadero, usted ha sido referencia en la crianza de toros bravos fuera del circuito de otros compañeros ganaderos contaminadores del descaste de la cabaña brava.
Aquí en Sevilla, es la tercera temporada que usted fracasa estrepitosamente y los que siempre hemos defendido su modo independiente de entender la fiesta primando la integridad y pureza de un toro encastado, nos sentimos profundamente decepcionados por el rumbo que han tomado sus toros.
En la tarde de hoy y es la tercera temporada, usted ha fracasado en Sevilla, pero la de hoy puede entenderse como la de mayor gravedad. Las dos anteriores constatamos que la presentación y trapío de sus animales no era el adecuado para una plaza de primera categoría, pero es que hoy se han unido en el hierro de la A de su propiedad, los dos defectos que le hacen la jugada perfecta a los antitaurinos, como es el aspecto gatuno de cuatro de sus toros y el comportamiento borreguil de los seis del encierro.
Díganos usted, qué cambio ha realizado en su ganadería para desequilibrar la nobleza con la casta y la raza. No creíamos que sus toros llegaran a confundirse en comportamiento con el actual monoencaste dominante que prefieren las presuntas figuras que dominan el escalafón. ¿ Como se ha plegado usted a la moda del toro borrego y parado de hoy en día?. Estamos seguros que de continuar por ese camino, la temporada que viene sus toros serán demandados por las figuras de pitiminí del escalafón. Ahora podemos comprender el misterio de su renuncia durante estas dos últimas temporadas a aparecer acartelado en Madrid. Si lo de Sevilla de esta tarde lo hace usted en Madrid, le corren a gorrazos hasta la Puerta del Sol.
Por favor recapacite y vuelva a la senda ganadera de la nunca debió salir. En estos momentos de carencia de casta y raza brava en la mayoría de las ganaderías, los aficionados echamos mucho de menos los atributos que mostraban sus toros cuando ofrecían emoción y riesgo, cuando el torero que le cortaba las orejas a un Victorino se encumbraba, en fin cuando usted era el ganadero preferido por el aficionado.
Los toreros de esta tarde, Padilla, Cid y Cortés, por mor de sus toros han aburrido al respetable, aún poniendo ellos todo lo que estaba de su parte, porque la otra parte contratante que es usted les ha fallado irremisiblemente.
UNIÓN TAURINA DE ABONADOS Y AFICIONADOS DE SEVILLA